Un pueblo que sabe combinar sabiamente su tradicional condición campesina y marinera, con su transformación, en albores del siglo XXI, en uno de los principales centros turísticos y de servicios de la Bahía de Cádiz.
En el extremo norte de la Bahía, la villa de Rota se abre al Atlántico desde una posición privilegiada, a caballo entre dos parques naturales: Parque Natural de la Bahía de Cádiz y el Parque Natural de Doñana. Sus habitantes se denominan roteños.
Parece ser que tiene un origen tartésico, luego se la identifica con la ciudad fenicia de Astaroth o Fuerte de Frontera. Durante la dominación romana debió existir un alfar para la fabricación de ánforas para utilizarlas en el transporte de salazones gaditanos.
Conquistada por los cristianos en 1264, fue cedida (1295) por Sancho IV a Alonso Pérez de Guzmán, conocido por "el Bueno", alcaide de Tarifa, en reconocimiento a sus gestas militares. Al poco tiempo, pasaría a la Casa de Arcos. Esta dependencia desaparecerá, en la primera mitad del siglo XIX, con la disolución en España del régimen señorial.
En el 1702 sería saqueada por un ejército anglo-holandés que destruyó muchos de sus monumentos. En 1811 volvió a sufrir el saqueo, esta vez de las tropas francesas. En su término se encuentra instalada desde 1953, una Base Aeronaval que utiliza conjuntamente Estados Unidos y España, la cual ha contribuido decisivamente a darle un ambiente cosmopolita a esta ciudad.
-Iglesia de la Caridad o de San Juan Bautista. De estilo barroco del siglo XVIII.
-Castillo de Luna. Edificio árabe del siglo XIII.
-Parroquia Nuestra Señora de la O. Construcción de los siglos XVI y XVII, que combina diferentes estilos arquitectónicos como el gótico, isabelino y barroco.
-Iglesia de San Roque. Edificio del siglo XVIII.
Destacan en el municipio las fabulosas playas rodeadas enclavadas en espacios naturales como El Parque Natural de la Almadraba, cuyos pinares y dunas constituyen un excelente paisaje para el ocio y la Educación Ambiental.
Parque El Mayeto y el Parque Atlántico.
Además debemos destacar un espacio natural con un gran valor ecológico, como es el pinar de Rota, de extraordinaria belleza y singular paisaje. Nos encontramos fundamentalmente el pino piñonero además de otro tipo de vegetación como la retama blanca, el lentisco o el espino negro. En él habitan una gran variedad de especies animales: aves, reptiles e insectos.
No debemos olvidar Los Corrales de Rota, que son construcciones situadas sobre la franja intermareal de las playas de Rota y Chipiona. El límite de este espacio natural queda definido por una línea poligonal que incluye una pradera y los ocho corrales.
De sus numerosas y extensas playas de fina arena dorada hay que citar:
Playa de la Costilla, situada al pie de la población con 4 km. de longitud y con un bello paseo marítimo.
A continuación la playa de Piedras Gordas o Los Corrales.
Ubicada en la carretera Rota-Chipiona nos encontramos con la Playa de Punta Candor,
que se encuentra bordeada por dunas y pinares de alto valor ambiental. Y finalmente la Playa de la Ballena.
- Carnaval: en febrero.
- Romería de San Isidro: en mayo.
- Feria de Primavera: en mayo. En la que junto a las actividades clásicas del recinto ferial, destaca el concurso de ganado selecto.
- Feria de la Urta: en agosto. Declarada de Interés Turístico Nacional de Andalucía”. Se celebra esta popular fiesta en honor al plato típico “la Urta a la Roteña “.
- Fiesta Patronal en honor de la Virgen del Rosario: la primera semana de octubre. Procesión, cabalgatas y juegos florales
Rota basa su gastronomía en sus productos autóctonos. De su tierra y de su mar genera su arte culinario. Destacando la Urta a la Roteña, el arenque, las tortillas de camarones. El tomate se convierte en auténtico protagonista de numerosos platos típicos tales como: “las piriñacas” y “el arranque”.
Otro de los platos típicos dentro de la cocina roteña es la “berza roteña”, potaje de habichuelas blancas, acelgas, apios, cebollas y ajos acompañados de la “pringá” (carne, tocino y morcilla). Pero es la cocina marinera la que le ha dado fama: degustación de erizos acompañados de una telera de pan y un vino fino, “burgaillos” cocidos con agua y sal, ortiguillas fritas y berdigones abiertos al vapor.
Entre sus vinos, cabe destacar “la Tintilla”, vino espeso, afrutado y dulce que sacia el paladar de los más exigentes. De entre sus dulces, se pueden degustar las yemas.