Para llegar hay que atravesar la urbanización Getares B hasta el aparcamiento, que se encuentra donde se acaba la calle pavimentada. A partir de ahí comienza un camino de tierra, flanqueado por un entorno arbustivo, en el que predominan los palmitos. Desde un primer momento hay que tomar como referencia la torre del Fraile y avanzar siempre en esa dirección. La primera parada es un edificio abandonado y de dimensiones considerables, de planta rectangular y un par de pisos de alto. En la actualidad suele estar ocupado por los bueyes y las vacas que pastan en estos prados. Tal vez éste sea el mejor lugar para contemplar la isla de las Palomas. Está muy protegida por multitud de escollos y, con la ayuda de unos prismáticos, es posible observar con detalle la cantidad de pájaros que anidan entre las rocas.
A continuación se suceden tres calas de las mismas características (forma de media luna, superficie de grandes bolos y fondo pedregoso), de las que la más bonita es la última, la cala Arena II .