La playa de Campo Soto, junto con la de Urrutia, ocupa una extensión muy considerable, alrededor de 9 Kms. de arenas doradas y finas. Es una playa ventosa y de oleaje moderado, lo que permite practicar el surf e implica una gran afluencia de usuarios y bañistas locales.
Para acceder el arenal desde San Fernando no hay ningún problema, a pesar de la existencia de algunas zonas militares próximas. La carretera hacia Campo Soto está en muy buenas condiciones, incluso dispone de carril-bici. A la altura de un cuartel militar rodeado de eucaliptos aparece una glorieta. Girando a la derecha continúa una carretera paralela a la orilla que conduce hasta un gran parking, desde donde sale una pasarela que comunica directamente con la arena. De hecho, hay cuatro pasarelas a lo largo de la carretera, y todas ellas cruzan un pequeño caño de agua.
Los equipamientos y servicios incluyen torre de vigilancia de la Cruz Roja, ambulancia y lancha de salvamento, además de banderas para señalización de peligro. También hay servicio de limpieza, lavabos móviles, duchas, vestuarios y, en temporada veraniega, tres chiringuitos abiertos.
PLAYA CANINA
En un tramo de la Playa de Camposoto puedes disfrutar con tu perro de la playa, del mar y de la arena, sin miedo a las multas si se cumplen las reglas. San Fernando es el único municipio de la provincia de Cádiz que ha habilitado, con la necesaria autorización, una parte de su playa para su uso por ciudadanos con sus mascotas.
La zona en la que se ubica, pasado el acceso 8 de la playa a 1,5 kilómetros de la Punta del Boquerón, responde a que es un área con baja afluencia de bañistas y está perfectamente señalizada desde la carretera de acceso a la playa con carteles que indican el camino que se tiene que seguir para llegar a la misma con las mascotas. También se han colocado paneles de señalización y contenedores de residuos a lo largo del sendero para que puedan ser usados tanto por los usuarios de la playa sin mascotas como por los que van con perros, de forma que les sea más fácil mantener limpia la zona de residuos.
El acceso de los perros a la playa canina se hará en todo momento en compañía de sus dueños, con correa, y única y exclusivamente a través del sendero peatonal de la Punta del Boquerón; estando terminantemente prohibido acceder a la misma por la zona de playa habilitada con servicios y equipamientos propios de la temporada estival. Además, el acceso de los perros a la misma se hará en todo momento en compañía de sus dueños y atados con correa.
Esta zona de playa canina ocupa una superficie aproximada de 5.000 metros cuadrados, donde las mascotas tienen que estar sujetas mediante correas, ya sea en el agua o en la arena. Dentro de esta superficie, se acotan 1.125 metros cuadrados mediante un vallado desmontable de madera respetuoso con el medio ambiente en el que las mascotas sí pueden estar sueltas, salvo las potencialmente peligrosas.
Debido a la baja afluencia de bañistas en esta zona, se ha prohibido el baño a los humanos -que podrán hacerlo desplazándose sólo unos metros- para que sean las mascotas las que puedan disfrutar del mar y así cumplir con las especificaciones en materia sanitaria. De esta forma, fuera de la zona acotada y en todo el frente delimitado como playa canina, los perros permanecerán con correas y siempre en compañía de sus responsables. En estas condiciones exclusivamente, las mascotas podrán acceder al agua.
En esta zona, y también al inicio del sendero de la Punta del Boquerón, se ha instalado panel informativo que contienen las normas de uso de esta zona para que los usuarios puedan estar tranquilos si cumplen todos los requisitos habituales exigidos a los perros: estar censados, llevar microchip, estar correctamente vacunado y desparasitado e ir acompañado de una persona mayor de edad que lo controle en todo momento.