
En el siglo XIX, año de 1.849, Don Antonio de Orleans, Duque de Montpensier, hijo del Rey Luis Felipe de Francia, realizaba un viaje de placer por Andalucía, descubriendo en la desembocadura del río Guadalquivir el Pueblo de Sanlúcar de Barrameda. Tanto gustó al duque aquel pueblo de pescadores con sus indescriptibles puestas de sol, que decidió instalarse en él, procediendo al poco tiempo, entre otros negocios, a la plantación de viñedos en la finca actualmente conocida con el nombre de Torrebreva.