Nacho G. Velilla se ha convertido en el gran gurú de la comedia española del siglo XXI. Creador de series de éxito como “7 vidas” o “Aída”, sobresale como la referencia actual de un género que tantas alegrías le ha dado al cine español.
Pero no nos engañemos, Velilla posee una visión de la comedia bastante chabacana mucho más cercana a Mariano Ozores que a Berlanga. Basta con repasar su filmografía para apreciar algunos de los títulos más taquilleros pero, a su vez, más infames de nuestra cinematografía reciente.
“Villaviciosa de al lado” tiene a su favor, sorprendentemente, una idea principal bastante atractiva e ingeniosa pero que se desarrolla de manera plana y deficiente.
Además me asombra que el guión de este producto lo firmen nada menos que ¡cuatro guionistas!... ¿de verdad que el trabajo de cuatro cabezas pensantes no da para más que una serie de bochornosos y manidos chascarrillos?.
Los diálogos de “Villaviciosa…” resultan sonrojantes, repletos de chistes facilones y zafios sin ningún atisbo de inteligencia. Gracias más propias de “memes” de internet que de un film estrenado en pantalla grande.
Y como en un film lo más importante siempre es lo que se cuenta salvo que su director sea un genio que sepa disimular sus deficiencias –que no es el caso-, tenemos un producto olvidable que ni siquiera es capaz de remontar con el esforzado trabajo de un reparto variopinto e irregular en el que sobresale la siempre estupenda Carmen Machi, actriz “todoterreno” que dignifica en cierto modo cada uno de los films en los que participa.
“Villaviciosa de al lado” es más un aburrido y poco imaginativo episodio televisivo que una película para la pantalla grande, pero este es el nivel actual del género en nuestro país…
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Crítica por Andrés Martín
