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El encanto de dormir en la tacita

Asomarse y admirar cómo el sol baña de oro la Catedral de Cádiz. Pasear por el claustro de un convento del siglo XVIII, hospedado en el mismo lugar en el que reside la Patrona de la ciudad. Abrir un señorial cierro trabajado en madera y encontrarse con la antigua calle más Ancha de Cádiz, la del trasiego y paseos de ese Cádiz burgués de los siglos XVIII y XIX. La enumeración eran placeres reservados a unos pocos desde hace bien poco. Ahora forman parte de las experiencias que podrá experimentar un visitante que opte por alojarse en alguno de los tres establecimientos que han abierto en los últimos tiempos en pleno centro de Cádiz. Son alojamientos con encanto, hospedajes cargados de valores más allá del servicio, para adentrarse en las experiencias y que desde ya pueden disfrutar los huéspedes del Hotel Convento Cádiz, La Catedral y el apartahotel Casa Palacio Cádiz.

Entre los tres establecimientos suman 92 plazas nuevas que ya están operativas en una ciudad con escasez de hoteles. El último hotel en sumarse ha sido el Hotel Convento Cádiz. Fue el pasado viernes cuando abrió sus puertas y pasó a ofrecer 23 habitaciones (entre habitaciones individuales, dobles y dos junior suites) en el convento de Santo Domingo. «En menos de 48 horas alcanzamos el 20% de la ocupación», explica su flamante director, David Taboas. De hecho, el hotel ha abierto con una ocupación del 100% el segundo día de funcionamiento. Y es que la necesidad de plazas hoteleras en la ciudad es un hecho, como confirma el director de Enin, S.L.
Entre los servicios del hotel destacan los almuerzos y cenas para grupos o empresas, el buffet de los desayunos o las habitaciones equipadas con minibar. Además, desde la dirección trabajan ya en ofrecer experiencias como actividades en el claustro o la posibilidad de conocer el convento con un guía de excepción: el dominico Pascual Saturio. «Queremos que el convento esté abierto a los gaditanos», explica Taboas.

El Hotel Convento Cádiz surge como reciclaje de la rehabilitación de Santo Domingo, en un principio destinado a geriátrico. Después de años cerrados y en virtud de un concierto que no llegaba, se optó por cambiar el uso del edificio. Curiosamente, el reciclaje en tiempos de crisis también ha hecho posible otro de los establecimientos que ya funciona en la ciudad, los apartamentos Casa Palacio Cádiz. Ubicados en una finca de la calle Ancha, en un principio estaban a la venta como viviendas de lujo. Hoy forman parte de un edificio de nueve apartamentos turísticos con las máximas comodidades y que dará alojamiento de 18 a 27 personas. Las plazas se distribuyen en estudios y apartamentos de uno y dos dormitorios. Según informa la página de reservas booking.es ya ha colgado el cartel de completo en distintos fines de semana de julio.

Vistas privilegiadas

Tampoco pueden quejarse en el hotel La Catedral. Su ocupación ya alcanza el 100% en la mayor parte de los fines de semana del verano, mientras el resto de los días de la semana va de camino. No es para menos, aunque los tenga a este hotel de tres estrellas bien le sobran los cuadros, basta con abrir una ventana y encontrarse a la Catedral como estampa. El nuevo establecimiento de Javier Bote ha sabido jugar la baza de las vistas y, además de las habitaciones, también se puede disfrutar de ellas en la terraza cafetería y en piscina. En total son 14 habitaciones dobles las que completan el casi centenar de plazas hoteleras nuevas con las que cuenta Cádiz este verano.
Estas ofertas se suman a otros establecimientos con encanto como la Casa del Panadero, ubicada en la calle San José y donde se puede disfrutar de la estructura y la decoración de una típica casa gaditana. El establecimiento de apartamentos abrió el pasado año pero es otro exponente de cómo alojarse en la Trimilenaria de una forma diferente. Ejemplos que invitan a la esperanza en un escenario de multitud de iniciativas hoteleras que se quedaron a medias o durmieron el sueño de los justos en un cajón.