Situada en el extremo del paseo de Pery Junquera, domina la entrada al puerto de Cádiz; este paso y su espacio interior son producto de rellenos marinos realizados en la década de los 80, con la finalidad de ampliar el espacio portuario. Gades, es el nombre de la ciudad en la época romana, aparece aquí como una figura de una joven desnuda que otea el horizonte del océano.
Una de sus manos sirve para cubrir los ojos de los rayos del sol, la otra apoyada en la cintura; en el antebrazo izquierdo se apoya un manto que al igual que el pelo se mueve al viento. La escultura, realizada en bronce, realista, en tamaño sensiblemente mayor que el natural, está apoyada sobre un pedestal de hormigón blanco, en el cual no hay más inscripción que Gades.