El Museo Catedralicio se ubica en lo que fue la antigua Casa de la Contaduría. Esta se encuentra asentada sobre la cávea del antiguo Teatro Romano de Cádiz. Se trata en realidad de un conjunto de edificios aglutinados en torno a la torre de la Catedral Vieja de Santa Cruz y que además de la Casa de la Contaduría incluye la Casa del Canónigo Termineli y el Patio Mudéjar o Casa del Deán.
El Museo ocupa la planta baja y primera, con acceso desde la Plaza Fray Félix a través de una portada manierista adornada con puntas de diamante que soporta el balcón con herraje de forja con el escudo catedralicio. Un amplio zaguán permite la contemplación de diferentes obras pictóricas entre las que destaca la Inmaculada Grande, cuadro de la escuela madrileña de singular belleza.
Atravesando el patio de la Casa de Termineli se llega al Patio Mudéjar en el que destacan vestigios romanos y medievales. A través de este patio se accede a una serie de salas que acogen tablas, pinturas, marfiles y esculturas de gran valor, así como las custodias, cálices y otras importantes obras de orfebrería y platería en su mayor parte pertenecientes a los siglos XVII y XVIII.
Recientemente se ha habilitado una sala dedicada a Las Cortes de Cádiz de 1812 y su relación con la Iglesia. En ella se exponen documentos y objetos relacionados con estos hechos, entre los que destacan el decreto de abolición de la Inquisición, las partituras del Te Deum compuesto para tal ocasión o la mesa sobre la que la tradición de la iglesia afirma que se firmó el texto constitucional, entre otros.
A destacar las Custodias del Corpus Christi, la del Cogollo, la de Ana de Viya y la del Millón. También destacamos las pinturas de la Escuela Sevillana, orfebrería y esculturas en marfil la gran mayoría.
Fuente: Ayuntamiento de Cádiz