No todo en esta vida es trabajo y estudio. Desde sus comienzos la Humanidad ha necesitado buscar momentos y vías para relajarse, descansar y sobre todo compartir tiempo con otros semejantes en actividades que no fuesen solo para trabajar. El ocio, los juegos, los deportes son tan antiguos como nosotros mismos. Este verano queremos reflexionar, a partir de las colecciones del Museo de Cádiz, sobre el papel que esas actividades de ocio han tenido y siguen teniendo a lo largo de nuestra historia. Por que el juego y la diversión forman parte de nosotros mismos y son también escuela de vida.
