La antigua Iglesia de Santa Catalina de Conil ha sido recuperada y convertida en un centro cultural.
La reforma de la antigua iglesia de Santa Catalina ha permitido estabilizar el edificio y simplificar algunos elementos decorativos. Los paramentos exteriores e interiores se han pintado de blanco en clara adecuación con su entorno. Los locales sitos en la zona sur se han comunicado con la capilla lateral, tras franquear una puerta que estaba tabicada, ganando espacio adicional para los actos públicos o culturales que se organicen en el nuevo edificio. La antigua sacristía queda reservada para la localización de la zona de administración –con despachos, aseos, almacén, camerino...- y está dispuesta en dos plantas conectadas.
La obra también ha posibilitado el acceso a la cubierta desde la que se disfrutan panorámicas de la playa y el mar. La recuperación se evidencia igualmente en la fachada que linda con La Chanca –donde se elaboraban los productos derivados del atún y se depositaban las artes de pesca, que pierde la concepción de zona trasera y anticipa la recuperación de este lugar protegido tan vinculado a la almadraba.
